La sinceridad consiste en mostrarse como uno es, sin fingir, y en comunicarse con trasparencia.
Libro Amar.
¿Qué es?
Según los niños, la sinceridad es:
- «Decir la verdad». Fernando.
- «Decir las cosas que son verdaderas porque sino, luego, te metes en líos». (Nuria)
- «Sinceridad es decir a todos la verdad». (Victoria E.)
- «Siempre decir la verdad». (Daniela)
- «Siempre decir la verdad». (Samuel)
- «La falta de sinceridad termina minando la confianza». (Rocío R.)
- «Decir la verdad». (Raquel)
- «Si no te gusta la camiseta de un amigo, se lo dices. O también, si no te quieres casar con alguien, se lo dices y ya está, no se tiene que enfadar, y si se enfada pues… lo siento. Eres sincera. Tú eres libre. Yo soy libre». (Nuria)
Aprender a decir la verdad es la base para adquirir otros valores tan importantes en la vida como la confianza, la bondad, la generosidad, la amabilidad, la responsabilidad, la justicia o la amistad. Por por qué en ocasiones los niños no dicen la verdad:
- Pueden tener dificultad para distinguir entre lo que es fantasía y lo que es real, en estos casos no existe intención de mentir, sólo una incapacidad para discernir entre imaginación y realidad.
- Conseguir algo que le interesa mediante la manipulación de la verdad.
- Un nivel bajo de autoestima y confianza en uno mismo puede llevar al niño a mentir y así afrontar una realidad que le disgusta o inventar situaciones donde sea el héroe.
- Obtener la atención de aquellos que le rodean.
- Evitar un castigo o una reprimenda por alguna falta cometida.
- Defenderse cuando se siente amenazado.
- Imitar el comportamiento de personas que son importantes para él.Antes de los 3 años, es muy complicado enseñar a los niños a ser sinceros, no están preparados.
De los 3 a los 9 años, los pequeños aprenden todos aquellos hábitos relacionados con la sinceridad. Al principio lo hacen a través de la observación y la imitación. A partir de los 6 años, ya están preparados para comprender la importancia de este valor y el niño puede esforzarse por decir la verdad, aunque en ocasiones le cueste.
Ideas para educar la sinceridad en los niños
Los estímulos y el ejemplo de los padres es fundamental para conseguir que el niño no mienta y afronte la realidad con la verdad. Algunas pautas pueden ayudar a conseguirlo:
- Estar atentos a los momentos en que el niño dice la verdad y alabar su comportamiento.
- Averiguar qué razones le impulsan a mentir e intentar corregirlas.
- Crear un clima afectivo de confianza, donde el niño no tenga miedo a ser rechazado o reprendido por no cumplir las expectativas.
- No hacer juicios de valor como llamarle mentiroso, mucho menos delante de otras personas.
- No presionarle en exceso ante una falta.
- Ser un ejemplo a imitar, las pequeñas mentiras del día a día de los adultos son observadas por los niños y posteriormente imitadas.
¿Sois sinceros? ¿Conocéis a personas sinceras?
- «Yo digo siempre la verdad». (Fernando)
- «Rocío B. porque alguien le dice «Rocío, enhorabuena por el diploma». Ella es sincera. (Nuria)
- «Yo con mi madre, porque me compró un chaleco que no me gustaba y le dije: «no pasa nada, yo te acompaño mañana y lo descambiamos». (Samuel)